El caso del Máster de Cristina Cifuentes en la Universidad Rey Juan Carlos ha hecho aflorar una mínima parte de la corrupción universitaria que ATU viene denunciando desde hace años y que apenas aparece en los medios de comunicación.

Además del favoritismo que la actual Presidenta de la Comunidad de Madrid recibió, como claramente muestran el cúmulo de irregularidades demostradas documentalmente, aparecen indirectamente en este caso otros pilares de esa corrupción.

El nepotismo y la endogamia en nuestras universidades, tejen redes clientelares que favorecen la corrupción, incumplen la legislación vigente, como en el caso de los “profesores visitantes”, y van contra el derecho a acceder en condiciones de igualdad, mérito y capacidad a las funciones y cargos públicos.

La Universidad Rey Juan Carlos es líder en profesores visitantes (424 en 2018, según su portal de transparencia), figura contractual sin transparencia, utilizada y compartida por la propia hermana de Cifuentes, Margarita Cifuentes Cuencas, y por dos de los tres miembros del tribunal del trabajo final de Cristina Cifuentes, las profesoras Clara Souto y Cecilia Rosado.

Resulta imprescindible que se llegue realmente al fondo del asunto, al tiempo que se depuren todas las responsabilidades, ya no solo políticas y administrativas, sino también penales de todos, absolutamente todos los implicados.

La impunidad no puede seguir imperando en los Centros Educativos Superiores, que deben ser modelos de gestión en todos los sentidos. Se necesitan referentes claros para mejorar la transparencia normativa, académica y de procedimientos en la Universidad y luchar así, de forma inequívoca contra la corrupción, que es, sin duda, uno de los cánceres de nuestra sociedad.

ATU

ASOCIACIÓN TRANSPARENCIA UNIVERSITARIA

@atuspain